A mediados de la
década de los
ochenta la elaboración de bases de datos en nuestro país, deja de ser un
trabajo inalcanzable para una gran
cantidad de centros
de investigación, ya que conocían
las ventajas de
acumular y cruzar la información.
Asimismo, los especialistas en computación se hicieron
conscientes de que no bastaba el simple uso de las computadoras y las
telecomunicaciones para organizar la información se requería además, programas
que permitieran estructurar la información para acceder a la misma en forma
fácil, rápida y confiable.
En el trabajo se volvieron indispensables las bases de datos
ya que se dieron cuenta de cuán eficaz hacia el trabajo, de que podían sacar
estadísticas en cuestión de segundos, de que se pueden hacer registros y
exportar todos estos datos; para que la computadora hiciera todo este trabajo
de forma inmediata y eficaz.
Las bases de datos pueden organizarse de muchas maneras, sin
embargo, el aumento de éstas ha llevado a generar técnicas de organización,
recomendaciones y hasta leyes para el uso adecuado y fidelidad de la
información almacenada.
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